sábado, 11 de mayo de 2013

CASTREXO

Poblado de Luca Tarlazzi

He vivido dos semanas en una diminuta península del Atlántico. Mirando a diario al mar que irrumpía en un pequeño golfo. Los días han sido pacíficos y grises, llenos de juegos, Estrellas y manjares.
A  pocos metros de mi cabecera, se extendían los restos de una civilización antigua, que amaba el mar. Habían construido su pequeño universo en un sitio privilegiado. El sol se ponía a diario para ellos, el viento no azotaba sus incipientes edificios y la vista hacia los dioses era extraordinaria.
Ahora, me voy, sabiendo que el mundo nunca ha parado en sus ansias de crecer, que el mar es infinito, que bajo las estrellas han florecido un millón de pueblos y que el futuro es aún más vasto de lo que había creído hasta ahora.

Porto do Espasante 14 de Julio de 2011

No hay comentarios:

Publicar un comentario